12/11/11

12.

Exactamente doce días hace desde que ya no estás, desde que todo se terminó. Desde que decidiste que ya no me necesitabas, ya tenías bastante con ella. ¿Y que hay de todo lo que ti di? Me quedé sin nada, perdí todo lo que era sólo por ti. Sabía que las posibilidades de tenerte, eran de una entre un millón, pero yo seguía luchando. Por todo. Luchando para que los kilómetros no pudieran con nosotros, para que el tiempo no nos alejase. No había segundo en que yo dejase de luchar. en cambio tú, te cansaste a mitad de camino, y yo no podía tirar por los dos sola. Y todo se fue viniendo encima poco a poco. Primero, dejamos de hablar como siempre, después, empezaron los celos, la desconfianza, las dudas. ''¿Me querrá? ¿seré sólo una más? ¿estará pensando en mi, o en ella? ¿de verdad me ama?'' ''¿La importaré? ¿habrá otro? ¿y si se ha vuelto a enamorar de su ex?'' Pero pese a todo, seguiamos luchando, pero las fuerzas iban disminuyendo al igual que las esperanzas.
Hasta que llegó el momento que mis ojos no querían presenciar. Me dijiste que no lo soportabas, que necesitabas acabar con esto y que tan sólo me querías como amiga. Dicen que, cuando más duele el adiós, más grande es el amor. Entonces, puedo decir bien alto que te amo, que me enamoré hasta las trancas de ti. Pero sé cuando basta es basta. Me toca olvidarme de ti, de tus besos, de tu forma de tratarme. Sabias hacerme sentir especial y a la vez tan insignificante. Tendré que olvidar todo, cada abrazo, cada conversación, de esas que duraban horas y que parecían segundos, cada estremecimiento al verte, cada suspiro dado por ti, cada canción, cada palabra y cada promesa. Sé que va a ser dificil pasar por esto...

No hay comentarios:

Publicar un comentario