4/1/14

Nunca, hasta ese momento, se ha dado tanta cuenta de que está solo.
Solo. Y se cubre de espanto.
Aprieta los puños.
El espanto no mengua.
Aprieta los dientes.
El espanto no mengua.
Se caga en todo, en sus muertos, en la vida, en su suerte, en su mal fario, en su miedo, en su destino, en su cárcel, en sus propios huesos, en todo, en todo, en todo.
Se caga en todo y el espanto no mengua.



Este fragmento pertenece al libro juvenil Parco del autor Jordi Sierra i Fabra.